La abrumadora información en la que estás sumergido en la actualidad, puede boicotear la percepción que tienes de lo que realmente es importante para ti.
En ocasiones, te puedes meter en una espiral en la que estés buscando continuamente lo complicado, la novedad, lo distinto, aquello que impacte sobre todas las cosas. No conviene olvidar la magia de lo simple, de lo sencillo, y de que lo que de verdad importa. Puedes tenerlo delante y dejarlo escapar sin que te des cuenta.
Me gustaría que pudieras considerar que una idea sencilla pero integrada de manera adecuada en el momento que nos toca vivir, puede sorprenderte tanto, que ni siquiera seas capaz de imaginarlo.
Por ejemplo, una idea antigua puesta en el contexto actual, sea en cuanto a entorno, a tecnología, a los ideales que defendemos, a la forma de relacionarlos con los demás, puede entenderse de forma tan básica, que no le demos importancia, y en ella, puede radicar la semilla de nuestro impacto presente y futuro.
La falta de tiempo, el exceso de estímulos, la gran cantidad de emociones que nos invaden continuamente tanto positivas como negativas, la tendencia de la mente a recordar el pasado y prevenir el futuro, nos hace no ver esa sencillez que está debajo de todo.
¿Dónde puede estar la esencia del éxito de cualquier persona? Me refiero a una oportunidad, un estado de ánimo, una inversión, una amistad, etc. Esta reflexión se puede extrapolar a múltiples campos y a infinidad de situaciones o estados en los que nos encontramos a diario.
Encontrar esa sencillez no es tarea fácil, el estrés, los hábitos no saludables, la influencia que ejerce el entorno, incluso lo que nosotros proyectamos en los demás, nos hace perder el foco.
Si haces bien las cosas y con consciencia, lograrás desarrollar la mayor capacidad que llevas en el interior, en ese estado, tu actitud será incontestable.
Un consejo que intento aplicar desde hace un tiempo es empezar con un pequeño gesto, el movimiento de un pequeño grano de arena puede convertirse en un movimiento de montañas. Una recomendación, evoluciona paso a paso y de repente, casi sin darte cuenta, puedes conseguir lo que te propongas.
Si te enfocas en buscar el éxito de lo sencillo, tendrás la capacidad de ver aquello que es diferencial y de poder centrarte en los detalles y en lo que verdaderamente es importante.
Si todo esto que te comento lo extrapolamos al mundo digital, lo sencillo también tiene su nicho, una simple foto puede tener más impacto que la infografía más elaborada, una pequeña frase puede impactarte más que un post de mil palabras, un negocio online simple pero que tenga impacto, puede tener un futuro prometedor.
Todos conocemos una idea pequeñita que finalmente acabó escapándose de las manos a su creador.
Como te he comentado en alguno de mis post anteriores, nos toca vivir en un momento de cambio, por ejemplo, memorizar ya no es tan importante, lo que es relevante es aprender a buscar la información. Entre la información, a veces imperceptible, se encuentra la simpleza a la que me estoy refiriendo.
¡Gracias por tu tiempo! Nos leemos 😉